lunes, 21 de junio de 2010

Catalina

Soledad adversa. Inquietud constante. Catalina se despertó, miró a su alrededor y bajó a comer algo de pan y té.

-¿Qué harás hoy?- preguntó Soledad, su madre

-No lo tengo claro aún, creo que mis compañeros de universidad están preparando una nueva asamblea.

-Supongo que sabes en lo que te estás metiendo...

-Supongo que sí.

Tomó su mochila y se dirigió a su segunda casa; la universidad. Ahí se encontraba Claudio y Thomas, quienes le preguntaron si estaba al tanto de lo que acababa de suceder.

-No tengo idea, ¿Qué pasó?

Fueron sus últimas palabras. Su madre lloró y sus compañeros no supieron cómo, cómo fue que Catalina terminó por morir en la lucha, en la lucha que hoy continuán almas luchadoras como la de ella.

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1 comentario:

  1. nos gusta, demuestra uno de los tantos casos en los que personas desaparecieron y jamas se les volvio a ver! es muy creativo y conciso!

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